Si ya es sorprendente que peregrine hasta Fisterra un tractor alemán de 1958 arrastrando una caravana de madera construida por el propio conductor, ¿cómo calificar el hecho de que solo un día después lleguen otros dos tractores alemanes, también en
peregrinación, e incluso uno de ellos también con una caseta de madera artesanal en el remolque?
Harold Walter Kroto , Premio Nobel de Química en 1996, estuvo el 25 de mayo en Fisterra, como otros colegas en los últimos meses y años que han acudido a la localidad de la mano de Jorge Mira , responsable del programa Conciencia, que es el que los trae en su labor divulgadora de la ciencia.
Resulta que Harold creció escuchando la radio a través de la BBC, y lo hizo durante muchos años. Siempre, siempre, esperaba a que diesen el tiempo en el mar, y entonces oía la predicción para Finisterre. Y siempre quiso conocerlo.
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