«Estas son aguas muy ricas. Frente a ellas ha pasado toda la historia de la Humanidad». Así describe Miguel San Claudio Santa Cruz, arqueólogo submarino responsable de la empresa Archeonauta, el mar de la ría de Corcubión y el que baña Fisterra. Lo dijo en la presentación de los resultados de la última campaña en la zona, realizada por siete personas durante 22 días del mes de julio, con más de 200 inmersiones (colaboró la empresa local Buceo Finisterre) durante 260 horas. El investigador ha dado continuidad a unas labores que ya vienen de seis años atrás, y que permiten ir localizando pecios campaña tras campaña, aunque todas son muy cortas.
Tras comprobar más de 50 puntos, descubrieron dos pecios más de la flota de Padilla de 1596 (ya se conocían cuatro, y debe haber muchos más, hasta 25), y dos vapores ingleses de finales del siglo XIX y principios del XX.
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