El tribunal confirma ahora que el inmueble levantado por la empresa Campoalsa no tiene derecho al permiso municipal. El alcalde, José Manuel Traba, recuerda que es un caso similar a los otros nueve enjuiciados y en los que en dos casos se dio la razón al Ayuntamiento, en seis a la Xunta y en uno la obra se podía legalizar haciendo pequeñas modificaciones.
La sentencia es firme y contra ella no cabe recurso ordinario. Aun así el regidor sostiene que ninguno de los edificios en cuestión tendrá ningún problema. La Xunta ya avanzó en su día que no pediría demoliciones. Lo que queda ahora es legalizarlos.
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